A pesar de las diferencias entre los países latinoamericanos, intentamos dibujar una visión general de la situación actual, los obstáculos fundamentales y las grandes oportunidades de la Industria 4.0 entre México y Argentina. En su mayor parte, estamos hablando de países con grandes territorios, recursos naturales y un inmenso potencial de crecimiento. Sin embargo, la mayoría se encuentra en una dicotomía constante entre grandes esperanzas y repetitivos retrocesos de todo tipo ¿Qué significa esto para la Cuarta Revolución Industrial? ¿La convierte en una utopía o un posible catalizador para un crecimiento sostenible?
Sin duda, no solo existe un inmenso potencial, sino también un enorme interés en la Industria 4.0 en toda América Latina. Después de que las empresas multinacionales fueran la punta de lanza del progreso en los últimos años, las pymes son cada vez más conscientes del tema. La mayoría de las empresas reconoce los potenciales generales de I4.0 y tiene proyectos de digitalización planificados y puesto en marcha. Sin embargo, tienen dificultades a la hora de alinear los programas de inversión y cambio entre departamentos, centros y unidades de negocio ya que siguen careciendo una hoja de ruta global que equilibre los costes y los beneficios a corto, medio y largo plazo. El problema se muestra en empresas de todos tamaños, sea por falta de recursos en las pequeñas o por complejidad aumentada en las grandes.
Hoy en día, incluso la mayoría de las grandes empresas siguen teniendo importantes retos en los fundamentos de Industrie 4.0, a nivel de la Computerización de los procesos y Conectividad entre máquinas, sistemas informáticos y equipos. Problemas típicos son interrupciones manuales y análogas del flujo de información, la falta y diversidad de interfaces de sistemas, así como el uso limitado de los sistemas y la falta de las competencias necesarias. Las pymes suelen partir de un nivel mucho más bajo en algunas áreas, al carecer de procesos estandarizados como base para los sistemas informáticos y las soluciones digitales. Siguen mayormente trabajando en la introducción de sistemas a nivel ERP, mientras que las medianas y grandes empresas suelen enfocarse en la integración estandarizada de datos del piso de planta hasta el nivel de negocio y entre diferentes departamentos y fábricas. Obstáculos fundamentales para todos son los sistemas heredados, las máquinas obsoletas y los largos periodos de inversión, que limitan la visión de los sistemas ciberfísicos. Cuando se trata de TI, los sistemas y procesos que faltan también pueden ser una oportunidad para establecer normas abiertas, compatibles y flexibles directamente desde cero sin lidiar con la transición difícil de 1001 sistemas. "Hacerlo digital desde el principio" es una de las grandes oportunidades para la Industria 4.0 en América Latina.
Un pilar básico de la Industrie 4.0 es el concepto del ecosistema. En Alemania y especialmente en el RWTH Aachen Campus lo estamos persiguiendo desde hace más de 10 años. Con el creciente apoyo de gobiernos, asociaciones y una amplia variedad de organizaciones, las comunidades también están creciendo en varios países de América Latina. En lugar de reinventar la rueda, muchos programas, centros y subsidios pretenden aprovechar acertadamente los avances en investigación y aplicación. Las siguientes tres necesidades surgen repetidamente en el intercambio con nuestros socios regionales y empresas de Latinoamérica:
Intercambio con pares en comunidades de I4.0: Conectar con tus pares y construir un potente ecosistema te ayudará a avanzar más rápido evitando muchos errores (no todos)
Formación continua en todos los niveles de la empresa: Invertir en tu personal para impulsar el cambio te ayudará a desarrollar, retener y atraer las capacidades y personalidades que necesitarás en el futuro.
Desarrollo y gestión del programa de I4.0: Definir un programa de transformación coherente y una estructura de seguimiento para su ejecución
La necesidad de formación continua afecta a toda la plantilla. Esto incluye una amplia formación en los aspectos básicos, el desarrollo específico de competencias especializadas, pero también el cambio de la forma de colaborar y tomar decisiones en la empresa. Hay que disipar los miedos, explicar las ventajas de forma comprensible y desarrollar la comprensión del propio papel. Al mismo tiempo, el compromiso y la implicación de la alta dirección son esenciales y exigen un examen intensivo de los conceptos, las implicaciones y el potencial de la transformación digital.
Además, se tiene que habilitar una estructura organizativa para toda la empresa que orqueste la transformación. Al fin y al cabo, no suelen faltar proyectos piloto, pruebas de concepto e ideas. Más bien, lo que falta es una clara priorización, secuenciación y sincronización de las actividades en función de los recursos disponibles y a través de los límites departamentales y de planta. Su programa de transformación debe tener en cuenta su punto de partida actual y el enfoque estratégico tanto como reflejarse en una trayectoria de transformación definida. Encontrará más información al respecto en nuestras "Insights" más abajo.
Marcel Hagemann